Respeto
El respeto a las personas, sus opiniones, sus competencias y su trabajo está en la base del comportamiento académico. Las discrepancias deben ser respetadas y no pueden ser motivo de exclusión, sino de suma y enriquecimiento.
Participación
La participación tiene que ser el mecanismo para la identificación de alternativas y la toma de decisiones. Las decisiones relevantes deben ser analizadas con la participación de todos los sectores que componen la comunidad universitaria.
Transparencia y Responsabilidad en la Gestión
Toda la comunidad universitaria necesita tener información sobre las decisiones adoptadas, su motivación y sus resultados. La transparencia y la rendición de cuentas es una obligación ineludible en todos los niveles y aspectos del gobierno de la Universidad y forma parte del compromiso ético que todos los gestores deben compartir.
Valoración del Mérito, la Capacidad y el Trabajo
El mérito, la capacidad y el trabajo de las personas son exigencias necesarias para alcanzar la objetividad y la equidad en la distribución de los recursos y en los procesos de selección y promoción, tanto del profesorado como de los profesionales de la administración y los servicios y de los estudiantes.
Independencia y Autonomía
Ambos principios tienen que ser los ejes rectores del funcionamiento de los órganos de control económico y de garantía de los derechos personales. También deben reflejarse en los órganos de representación de los estudiantes, para que puedan manifestar libremente sus reivindicaciones y participar en todas las decisiones que afectan a su formación.